Que el Covid ha supuesto un varapalo para las instituciones de deportes tradicionales es una realidad. Todos los clubes de LaLiga han visto reducidos sus ingresos en gran medida, sobre todo por la reducción del ticketing.
La facturación ha caído drásticamente. De ingresar, como poco, 40 euros por entrada x 18.000 entradas cada dos semanas, se ha pasado a 0 euros. Los equipos que más dinero han dejado de ingresar son los que contaban con estadios grandes, como es lógico.
La evolución salarial se ha visto directamente afectada, ya que ha sido el grueso de capital del que los equipos han recortado para cubrir sus gastos del día a día.
Respecto a la temporada pasada, el límite salarial del FC Barcelona se ha reducido un 43%. El Valencia, segundo equipo que más ha tenido que disminuir esta cifra, llega al -39%. La horquilla en el descenso del límite salarial de Levante, Betis, Atlético de Madrid y Real Madrid se encuentra entre el -31% y el -26%.
Alavés, Eibar y Getafe también cuentan con menos capital para los sueldos de sus trabajadores esta temporada, entre un -15% y -7%.
Por su parte, otros clubes han podido esquivar la crisis que la pandemia ha generado. Sevilla y Celta mantienen el límite salarial del año pasado. Athletic Club, Osasuna y Real Sociedad crecen en este sentido entre un quinto y un sexto respecto a 2019/20. El Villarreal se alza con un +33%, Valladolid con +54% y Granada, tras su magnífico desempeño en la competición liguera, +59%.
Los recién ascendidos son los que más ven elevado este límite, gracias a los derechos de televisión que otorga alcanzar la Primera División. El Huesca, antepenúltimo en este ranking, logra un 127%. El Cádiz triplica sus cifras con un 353% y el Elche rompe todos los esquemas al quintuplicar (580%) su anterior cifra máxima.